PREGONANDO TU ALEGRÍA. Por Maite García Díaz

Hoy traemos al Incensario un precioso escrito de nuestra amiga Maite, a la que agradecemos querer compartirlo con nosotros y desde este blog con todos los que nos visitáis.

Llegaste al mundo ligada a Dios desde el momento de tu llegada al mundo terrenal.

Dios te llamó para que formaras parte de la Congregación de las Hermanas de la Cruz. Tu vida, desde ese momento se inundo de un amor a Dios infinito. Y fue porque el quiso indicarte a ti entre todas para llegaras como las palomas blancas que se posan en la fachada de cal blanca de la que ha sido tu casa durante la mayor parte de tu vida. Es por eso que en una madrugada fría del mes de enero, el mismo que te dio la vida te llamaba a compartir su Gloria.

Junto con dos ángeles más que hay en el cielo del Perchel, Hermana Visitación y Hermana Eulalia, en esa fría madrugada de enero otro ángel más volaba hacia el Cielo de la barriada perchelera de una tierra manchega de Ciudad Real, que tendrá por siempre un grato recuerdo de su Hermana de la Cruz con el corazón más humano de esa congregación. Ese será el nombre que quede imborrable en la fachada del convento y de su barrio del perchel que tanto la quiso y que tanto la quiere, por eso hoy en mi corazón ese será uno de los nombres que quedarán grabados de por vida. El de Hermana Alegría de la Cruz.

MAITE.